La mayoría de los bebés pasa por un salto de crecimiento alrededor de las 6 semanas de edad y tiene más hambre que antes, necesita más leche.
Como solución podemos dejar el bebé más tiempo en el pecho en cada mamada por algunos días, o ofrecer mamadas extras antes de las siestas, también por algunos días. Quien no amamanta, simplemente puede aumentar cada mamadera en 30 ml.
Esto evita que el bebé duerma mal porque tiene hambre durante este periodo, y las 2 opciones para quien amamanta tienen como objetivo aumentar la producción de leche. Después de unos días, el cuerpo logrará adaptarse para producir la nueva cantidad de leche que el bebé necesita.
Para quien amamanta exclusivamente, esta también es una gran edad para empezar a dar una mamadera con leche materna al final del día. Así el bebé se podra acostumbrar a la mamadera y no tendrá problema en usarla de vez en cuando cuando la madre no esté cerca. Paula Roitman Pedagoga Especializada en el Aprendizaje del Sueño Infantil
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